Cada año se venden más de 80.000 millones de prendas de ropa en todo el mundo. Este volumen de producción sitúa a la industria textil como una de las más prolíficas, pero, también, como la segunda más contaminante del planeta. La implementación de metodologías y procesos sostenibles se ha convertido en un objetivo perentorio dentro del sector.
Como consecuencia, han aparecido nuevas fórmulas y propuestas adaptadas a las nuevas demandas de un público especialmente concienciado. El auge de la moda ética o sostenible se ha convertido en una tendencia cada vez más popular. Precisamente, porque no constituye ningún tipo de peligro para el entorno. Pero, además, también se enmarca dentro de un contexto de compromiso y protección social.
La preservación de los recursos naturales, el reducido impacto que generan los materiales utilizados a nivel ecológico o la protección laboral de los trabajadores que se integran dentro de sus fases de elaboración y venta, son algunas de las garantías que proporcionan sus modelos de negocio.
Esta línea conceptual y basada en la responsabilidad global ha gestado proyectos orientados a la fabricación de productos funcionales y prácticos, pero también saludables en toda la extensión de la palabra. La ropa infantil sostenible de LemonetKids.com es un ejemplo de ello.
El origen de esta marca se encuentra en Cristina Blesa Torreira, emprendedora con formación en ADE y Marketing, pero también madre de familia. Todo empezó cuando encontró ciertas carencias en el mercado textil, concretamente en el segmento infantil. No era capaz de identificar propuestas que se ajustarán a las necesidades de sus hijos. Así, decidió pasar a la acción y comenzó a elaborar sus propios estampados.
Aunque en un comienzo se trató de un experimento creativo, los resultados fueron tan positivos que decidió continuar alimentando esa línea de trabajo. Al final, acabó transformándose en un sólido modelo de negocio. Su formación en decoración y su pasión por el segmento infantil fueron importantes influencias en sus metodologías y fórmulas creativas. LemonetKids pasó a transformarse en una empresa prometedora y con la suficiente personalidad como para integrarse en el mercado y posicionarse como una marca de referencia.
LemonetKids cuenta con el certificado GOTS: El estándar más elevado en materia de sostenibilidad
En la actualidad, su sede productiva se ubica en un pequeño taller de Barcelona. Además, todo el stock que se genera dentro de sus humildes instalaciones cuenta con certificación GOTS.
En el sector textil existen diferentes certificados que funcionan como aval en materia de sostenibilidad. Entre ellos, el más reconocido a nivel internacional es el GOTS (Global Organic Textile Standard).
Los negocios que han recibido un certificado GOTS cuentan con un modelo de trabajo que cumple estrictos criterios medioambientales. Por lo tanto, sus clientes tienen la certeza de que durante todos los procesos de producción, partiendo de la cosecha del algodón hasta la elaboración de la prenda final, se ha respetado el medio ambiente. Además, también funciona como una garantía de que las fibras orgánicas no han estado en contacto con fibras tradicionales y también de que todo su stock posee los porcentajes mínimos exigidos de tejido orgánico.
Por otro lado, una certificación GOTS también es un indicativo de calidad. Las prendas identificadas bajo este sello poseen mejor respuesta ante procesos de lavado o la exposición al sudor corporal. Además, están elaboradas a base de materiales más sólidos y con mayor durabilidad. Sus procesos de producción están sujetos a un estricto análisis de calidad que impiden que cualquier tipo de residuo o elemento potencialmente tóxico esté presente dentro de los tejidos que formarán parte de la prenda final. Un elemento fundamental, especialmente, dentro del ámbito infantil.
El componente humano también tiene un importante peso. Para que este certificado pueda ser emitido, la empresa debe contar con unas políticas laborales específicas. Todos los productos que poseen dicho distintivo deben haber sido producidos en un contexto de no discriminación y libertad, a partir de unas condiciones salariales que faciliten la vida digna de los empleados.
En definitiva, optar por un producto textil certificado con el sello GOTS significa apoyar a un modelo productivo y respetuoso con el medio ambiente. Uno que protege los derechos de los trabajadores y que, además, está libre de cualquier tipo de componente químico tóxico.
LemonetKids: Un concepto fresco para un público fresco
Aunque el componente creativo y técnico recae sobre Cristina Blesa Torreira, el alma del proyecto pertenece en parte a sus pequeños. Todas las prendas que forman parte de la firma están verificadas literalmente por ellos, por lo que podríamos decir que sus propuestas no sólo son creadas para niños, sino que están aprobadas por ellos.
Todas las fórmulas, no obstante, están sujetas a fundamentos básicos imprescindibles: Están creadas a partir de patrones sencillos, proporcionan comodidad, son funcionales y fácilmente combinables entre sí. Además, todas las prendas de LemonetKids poseen estampados característicos y exclusivos, repletos de inspiración y buenas vibraciones.
El origen del nombre es un juego de palabras. La raíz es “lemon”, una fruta que posee innegables connotaciones de frescura y jovialidad. LemonetKids, es una fórmula que conjuga dichos matices, pero que acentúa el componente jovial hasta llevarlo al terreno infantil.
