Con el boom de internet y de las compras online, las empresas siguen buscando nuevas formas de agilizar y facilitar las compras, de hacer que el trámite de pago sea lo más sencillo y, a la vez, lo más seguro posible. Gracias a eso, el sistema de cobro telefónico con tarjeta está ganando mucho terreno. Es una solución nueva, pero a la vez familiar; rápida, pero a la vez segura. Es un sistema de pago que recoge lo mejor de las nuevas tecnologías para hacer las cosas más fáciles a los compradores, pero también a los vendedores.
¿Qué ventajas ofrece el cobro telefónico con tarjeta?
El cobro telefónico con tarjeta es una solución fácil de integrar en prácticamente cualquier negocio. Empresas como Paybycall.es se han encargado de ofrecer un sistema que se puede integrar en empresas de todo tipo y que funciona perfectamente. Además, garantizan la total seguridad de todas las partes implicadas y un uso totalmente sencillo, tanto para el consumidor como para la empresa. Aunque para esto último, como explicaremos más adelante, es vital que el servicio cuente con la certificación de seguridad PCI-DSS de nivel 1.
Y esa facilidad es precisamente una de las grandes ventajas del cobro telefónico con tarjeta. El comprador solo tiene que confirmar sus datos a través de una llamada. Al otro lado del teléfono, una operadora se encarga de recopilar toda la información una vez ha corroborado la veracidad de la información, procediendo a cerrar el pago para que el pedido se tramite en el menor tiempo posible. Además de eso, todo se mueve con suma celeridad, lo que hace que las esperas sean mínimas. Y esa facilidad es precisamente una de las grandes ventajas del cobro telefónico con tarjeta. El comprador solo tiene que confirmar sus datos de tarjeta a través de una llamada a una aplicación automatica de alta seguridad sin intervención humana. Una vez se ha corroborado la veracidad de la información, procede a cerrar el pago para que el pedido se tramite en el menor tiempo posible. Además de eso, todo se mueve con suma celeridad, lo que hace que las esperas sean mínimas.
Este tipo de cobro está disponible las 24 horas del día y los 7 días de la semana, no hay limitaciones horarias. Además, al terminar la tramitación, el usuario recibe acceso de inmediato al producto o servicio al que quisiera acceder pagando. Y lo que es mejor, sin necesidad de realizar los trámites habituales de las pasarelas de pago. No las hay. Es la propia llamada la que actúa como tal, haciendo que todo se mueva todavía con más rapidez.
Para los clientes es un método cómodo, seguro y totalmente verificable, que garantiza además su protección y la inmediatez de sus peticiones. Para las empresas es, por otra parte, una solución que agiliza la gestión de los cobros y que les permite acercarse a todavía más personas. Es un sistema que encaja perfectamente con cualquier campaña de telemarketing, ya que no se pide a los clientes facilitar números de cuenta o solicitar pagos a contra reembolso. Los negocios que lo han puesto en marcha ha visto cómo su tasa de conversión aumentaba considerablemente en poco tiempo.
Negocios que pueden sacarle el máximo partido
Viendo su naturaleza, es fácil pensar que el cobro telefónico con tarjeta encaja perfectamente con el e-commerce, y es totalmente cierto. Se puede habilitar como otra opción de pago más, disponible junto a las habituales, para dar más opciones a los compradores y permitir que tengan toda la flexibilidad y seguridad posibles. Ahora bien, quedarse solo en esa área de negocio sería como señalar la Luna y fijarse en el dedo que la señala, una tontería.
Es un sistema que se integra a la perfección en negocios de venta por catálogo, al igual que en cualquier venta por teléfono. Cualquier empresa de seguros, de viajes o de mil servicios diferentes, que lleve a cabo campañas de ofertas por teléfono, puede aprovechar este sistema para tramitar toda la adquisición del cliente al momento, sin sumar más pasos intermedios que puedan hacer que este acabe dudando y, definitivamente, retirándose de la contratación o de la compra.
También funciona en los más que conocidos call centers de las compañías, al igual que en negocios de la teletienda. Modelos de negocio para el pago telefónico hay muchos porque, al final, es algo que encaja perfectamente en toda empresa que trate de ofertar y vender sus productos y servicios por vía telefónica o por vía digital. Es una herramienta más, otra forma de facilitar la conexión entre comprador y negocio para que ambos puedan llevar a cabo los trámites de compra de otra manera.Una que es más rápida, cómoda y, sorprendentemente, segura.
La seguridad es clave para su eficacia
Es cierto que este sistema puede generar dudas entre los consumidores y también entre las empresas. ¿Cómo se puede garantizar que un pago validado a través de una llamada telefónica no cause problemas? ¿De qué manera se puede proteger la privacidad del cliente? ¿Se puede evitan las malas intenciones de terceros, la suplantación de identidad? Son preguntas habituales, pero todas ellas tienen respuesta.
Las empresas que ofrecen un servicio de calidad, un sistema de pago telefónico seguro, cuentan con lo que se conoce como certificación PCI-DSS de Nivel 1. Este corresponde a los negocios que manejan un volumen de más de 6 millones de transacciones mediante el uso de tarjetas Visa o Master Card anualmente. Y solo se ofrecen en el caso de que se cuente con todas las medidas de seguridad adecuadas para proteger a todas las partes implicadas.
Para ello, hay un estándar de 12 requisitos a cumplir, que son los siguientes:
- Firewall actualizado para la protección de datos del titular de la tarjeta
- Uso de contraseñas avanzadas para el sistema
- Protección de datos almacenados de los titulares de tarjetas
- Cifrado de transmisión de datos del titular de la tarjeta
- Protección de sistemas frente a malware de todo tipo
- Desarrollo y mantenimiento de apps y sistemas seguros
- Restricción del acceso a datos del titular de la tarjeta
- Identificación y autenticación del acceso al sistema
- Restricción del acceso físico a los datos de los titulares de tarjetas
- Rastreo y supervisión de accesos a los recursos de red y datos del titular de la tarjeta
- Comprobación periódica de los procesos y sistemas de seguridad
- Política de protección de información de todo el personal implicado
Como se puede comprobar, estos requisitos garantizan un sistema blindado a prueba de ataques y, sobre todo, 100% seguro para los consumidores.